Pese al título del post, parto de la base que son dignos de elogio los intentos de PRISA Radio por poner en marcha proyectos para la comunidad castellano-hablante a partir de la privilegiada situación del grupo y las posibilidades que ha ido permitiendo la sociedad de la información (de la emisión vía satélite en adelante).
Me detengo en tres palabras del título: «Otro«, porque éste no es el primer espacio que reúne los esfuerzos de las distintas cadenas de PRISA Radio. En este mismo post se repasan otras como La Ventana al Mundo, que fue el germen de Hora 25 Global o los deportivos Sudáfrica Veinte-Diez, Carrusel Mundial, los Premios 40 Principales,…
«Intento» porque la principal apuesta, Hora 25 Global, tuvo una vida breve en términos radiofónicos: Se emitió entre 2008 y 2011. Parece que el deporte es un nexo más fuerte y duradero.
Y «Tímido«: No hay más que repasar su continuidad en la parrilla o los horarios de emisión de estos programas… al menos en la Cadena SER. La impresión innegable es que algunos de estos espacios están metidos con calzador y con desgana, que se emiten por compromiso y sin demasiado entusiasmo.
Y eso que PRISA Radio se presenta con la seguridad en sí misma que otorgan «veintiséis millones de oyentes, mil quinientas emisoras en todo el mundo, trece millones de usuarios en Internet y una posición de liderazgo en España y en los principales mercados de habla hispana, hasta en diez países (…) PRISA Radio es la segunda cadena más grande del mundo. Y aspira a seguir creciendo en Estados Unidos, Perú y Brasil para ser una radio cada vez más global«.
Ese espíritu pan-hispanoamericano ha llegado incluso a la dirección general de la Cadena SER, que ostenta el periodista colombiano Alejandro Nieto, desde finales de 2010.
Hasta esa fecha y durante cuatro años se encargó del proceso de homogenización de las cadenas de radio del grupo en distintos aspectos, un proyecto denominado Una sola radio… de ida y vuelta (una expresión usada para aglutinar los palos flamencos cocinados en Latinoamérica). Es decir, él fue en parte responsable de proyectos comunes como Hora 25 Global o la cobertura compartida por las cadenas del grupo de las Elecciones en EE.UU. de 2008 o el Mundial de fútbol celebrado en 2010. El propio Nieto explicó su filosofía a Juanita Samper tras su nombramiento:
«Obedece a un mensaje de cercanía entre países que quiere mandar la empresa (…) Esa es la idea: si van los españoles a nuestros países, ¿por qué no pueden venir mexicanos, colombianos o argentinos a España? En mi condición de comunicador con experiencia en gestión, tengo muy frescos los contenidos de las diversas radios en América».
Lo que no parece tener tan frescos son sus conocimientos radiofónicos: ¿Mala memoria o desconocimiento? El periodista y directivo colombiano debería saber que algunas de las estrellas más populares de la radio española procedían del otro lado del Atlántico: Desde el argentino Pepe Iglesias alias El Zorro (años cincuenta) o el chileno Raúl Matas (década de los sesenta) hasta el más reciente Héctor del Mar (años ochenta). Para más inri, los tres citados trabajaron en la propia Cadena SER que ahora él dirige (y algunos recibieron el Premio Ondas, entregado por su grupo de comunicación).
Nieto, que creció profesionalmente en Radio Caracol, la otra gran pata de PRISA Radio junto a la SER, tuvo claro desde su aterrizaje que «Carrusel Deportivo es más que un programa, es una forma de sentir y vivir el deporte«. Últimamente están estirando la marca más de lo que parece juicioso: Carrusel es deporte en directo y retransmisión de competiciones, no cualquier programa deportivo de información. Un mal que se detecta en el caso que nos ocupa.
Carrusel Mundial ¿en Londres?
El espacio se ha emitido durante los Juegos Olímpicos de 2012 en ocho países que cuentan con cadenas participadas por PRISA Radio. Siete de ellas están repartidos por América (con una diferencia horaria máxima de tres horas) y la octava es la Cadena SER, que lo ha emitido de lunes a domingo en un horario de escasa repercusión: De cinco a seis de la madrugada, restando una hora a un Si Amanece nos Vamos que enfila su recta final apurando sus últimos días con María José Gil al frente.
Como sintonía del programa, el «London Calling» de The Clash. La elección no por previsible es menos acertada, lo que falla es no saber dosificar su presencia, algo importante en un programa de emisión diaria. Tampoco falta una de las señas del Carrusel: El «gol» en código morse, no en su función original sino como punto y seguido. La primera presencia chocante para la audiencia española son los titulares de apertura (con joyas impagables como «¡Demolition! La selección estadounidense de baloncesto derrotó a Túnez«).
Igualmente chirriante puede resultar en ocasiones la labor del conductor del espacio, Mauro Smith (imagino que es una opinión no compartida por su audiencia habitual, la de ADN Radio Chile). Esa disonancia no tiene tanto que ver con un acento distinto o con expresiones llamativas (que convierten a la pértiga en garrocha pero que no pasan de anécdota) como con el que ha venido siendo, al menos hasta ahora, el sello que impregnaba hasta la última de las emisiones de la Cadena SER en las décadas precedentes.
Las dudas son legítimas al escuchar, por ejemplo a José Antonio Ponseti. Y me fijo en él porque consta como co-presentador del espacio, sólo en teoría, pero también porque ha ocupado un destacado papel en la cobertura olímpica de la SER (este tipo de omnipresencia suele llevar emparejada fatiga y altibajos en la intensidad y calidad de la participación).
Pero no sólo eso, actualmente es pieza clave en Carrusel Deportivo teniendo en cuenta que Manu Carreño ha demostrado que la radio es su segundo plato (ausencias en Europa League o Eurocopa en favor de su presencia televisiva). Sin Carreño tomando el timón de una manera firme, con Laura Martínez en un papel que no parece incluir el liderazgo y De la Morena recluido en su castillo, Ponseti ha terminado por ser quien marca el ritmo y el tono del deporte en la SER; un profesional que, como ya escribí, se encuentra en la encrucijada entre el periodista y el bufón (ambos roles muy dignos y respetables).
Ponseti debía servir de vínculo con el pasado inmediato, el del Carrusel de Paco & Pepe, pero parece haber absorbido sólo una parte del legado, no necesariamente la periodística. El barcelonés, que ha demostrado su valía profesional en numerosas ocasiones (cubriendo el Mundial de Rallies para Canal+, un magazine en Miami, SER Aventureros,…) parece haberse decantado por encarnar un rol de escasa aportación y chanzas sin gracia que interrumpen el trabajo ajeno, demasiado próximo al que popularizó en la primera hora de los sábados en la etapa anterior de Carrusel (donde adoptó con entusiasmo el papel de gañán irreverente, zafio, patoso y fiestero).
Y es que la gracieta siempre, por sistema, por encima de la información es comprensible en un morning show pero no en Carrusel, por muy ameno e informal que se quiera plantear y por mucho que se trate de deporte y no de información de contenido político o económico.
El riesgo es que Ponseti -creo que tampoco le beneficia en nada renunciar al nombre de pila en promos y cortinillas- contagie su estilo a otros compañeros/as más jóvenes de la redacción de deportes, alejándolos de lo que ha sido el estilo SER (que sí mantienen otros y otras profesionales de la casa repartidos por las diferentes emisoras). Cito lo del contagio porque junto a él (casi) cada noche ha estado desde Londres Aitor Gómez, que se ha sumado a la deriva que encabeza el barcelonés.
He puesto el foco en Ponseti por su presencia en este Carrusel Mundial en Londres pero también lo podía haber hecho en SER Deportivos (la edición de Madrid), donde Jesús Gallego no parece ser consciente de su condición de referente tras el exilio de 2010 y permite boutades (de intensidad creciente) a los componentes de la renovada redacción de deportes. Por contra, Fco. José Delgado (alias Pacojó) sigue mostrando la cara más brillante de la Cadena SER.
Por supuesto, tanto Ponseti (cuyos méritos he detallado antes) como Gómez son capaces de mostrarse como periodistas solventes y han dado destellos de su capacidad en este Carrusel Mundial en Londres pero la tónica general ha sido otra. Sin confusiones: No digo que deban mostrarse circunspectos para demostrar su profesionalidad, pero lo prefiero sin duda a su pugna por soltar la gracieta más (presuntamente) ocurrente sin apenas aportar opiniones razonadas o datos de interés aún desde un ambiente informal y distendido.
Mauro Smith, sin embargo, parece ser de la misma opinión que Ponseti y Gómez pues asegura que «más allá de la información y la opinión, este programa es entretenimiento«. Por cierto, las únicas voces que entran desde el lugar de la noticia son los citados Gómez y Ponseti, el resto -Smith incluido- lo hacen desde sus respectivos países, lo cual empobrece el resultado final.
Y el resultado final no es otro que un coro (por momentos anárquico) entregado a lugares comunes, a la información de teletipo, a la reiteración, la gracieta vacua, los amables piques nacionalistas o las referencias extemporáneas al fútbol. Esto último se puede deber al origen futbolístico del programa (luego desarrollo este apartado) pero también al monocultivo que practica el periodismo deportivo.
En el debe también se encuentran los contados cortes de voz que ilustran los cincuenta y cinco minutos de programa y apenas un par de secciones (repaso de El Medallero y efemérides olímpicas en Un día como Hoy). Por cierto, mucho se ha hablado en estos Juegos Olímpicos de la destacada presencia femenina pero su papel en el programa ha sido testimonial (en otras etapas del mismo contó, por ejemplo, con Georgina González desde México). Chocante si tenemos en cuenta que se trata de un grupo mediático que presume (en ocasiones con razón) de puntero en cuanto a igualdad de género.
Carrusel Mundial en Londres fue presentado como «una crónica global de los JJ.OO. (…) con información de primera mano y análisis de expertos, entrevistas en vivo y la unión de todas las emisoras de Grupo Prisa» pero realmente ha resultado la mayor parte del tiempo como el programa que podrían haber hecho cuatro amiguetes con algo de labia en una emisora amateur de barrio con un periódico deportivo comprado en el kiosco. Sí, es una definición reduccionista y seguramente injusta para un grupo de profesionales, pero la sensación de abrir micros con la justa coordinación previa y la fatigosa reiteración de obviedades ha sido diaria (sirva el último programa como ejemplo definitivo).
Tampoco ha ayudado un planteamiento, como mínimo, singular. Hubiera sido un concepto interesante o, al menos, con cierto sentido, un programa dedicado a repasar la participación olímpica de los países hispanoamericanos pero éste no ha sido el caso. Participaron representantes -denominados jinetes, imagino que proviene del jockey en jerga radiofónica- de las cadenas de PRISA Radio que se centraron casi exclusivamente en la (pequeña) parte de América Latina desde la que participaban. Una mirada parcial con algunos casos chocantes: El «jinete» de Costa Rica (ADN Radio Costa Rica) poco tuvo que contar de la escasa representación de su país (incluso cuando lo extendía a toda Centroamérica) mientras que el representante de turno que entraba desde Florida (Caracol Miami) nadaba en la indefinición con un ojo en Cuba y otro en los propios EE.UU., protagonistas en lo deportivo pero con limitada presencia latina en sus filas. Ah, las otras cadenas presentes fueron Radio Continental de Argentina, W Radio México y Radio Caracol de Colombia.
En general, los estados latinoamericanos han obtenido tradicionalmente pocos éxitos olímpicos (ninguno ha estado en Londres entre los treinta primeros puestos del medallero) y España, en este caso, es el tuerto en el país de los ciegos desde su vigésimo primer puesto. No hay mal que por bien no venga, este hecho potenció aún más la celebración de cada medalla con el pero de que la repercusión en cada país se tornaba en protagonista por encima de la información de primera mano desde la propia sede olímpica.
Por cierto, el argentino Sergio Kanevsky, otro de los «jinetes» del espacio también elaboró píldoras dedicadas a la historia de los JJ.OO. («Leyendas olímpicas») que fueron emitidas a lo largo del día en la Cadena SER durante esa quincena de sobredósis deportiva.
Sólo faltó rematar este Carrusel Mundial en Londres como se despidió el de la Copa América, con un grito conjunto del elenco de periodistas participantes en una guinda naïf… y en italiano (en este caso el «ciao, América» hubiera tenido que ser ligeramente modificado).
El deporte es el puente:
Carrusel Mundial y Sudáfrica Veinte-Diez
Precisamente en este espacio tiene su origen la versión olímpica que centra este post. Ambas comparten conductor, el citado Mauro Smith, pero no periodicidad ni tampoco temática pues esta versión hispano-americana del Carrusel (que, para empezar no es un Carrusel como he expuesto con anterioridad) está centrada casi exclusivamente en el balompié. Lo de casi es porque alguna vez se cuela la Fórmula 1, algún torneo de tenis o eventos como los Juegos Panamericanos o el Mundial de Atletismo.
En palabras de sus responsables, Carrusel Mundial es «un programa a estadio lleno que convoca a las voces más goleadoras del periodismo deportivo radial de Hispanoamérica en una ONU deportiva: España, Colombia, Costa Rica, Estados Unidos, Argentina, México y Chile«. Por cierto, hay presencia de la redacción de deportes de la SER pero el espacio no se emite en este cadena. Su periodicidad es semanal y se viene emitiendo los domingos por las cadenas de PRISA Radio en el continente americano desde hace seis temporadas.
Y si Carrusel Mundial en Londres ha aprovechado la inercia del Carrusel Mundial, algo similar ocurrió con Sudáfrica veinte-diez, espacio con similares características y que sirvió para prologar la Copa del Mundo de 2010 durante los meses previos a su inicio o, según la nota de prensa: «un pre-calentamiento para poner en marcha la maquinaria de Unión Radio«. Sí, por entonces aún se denominaba así.
El representante de la Cadena SER en aquella experiencia fue Joseba Larrañaga (ahora en la medianoche de COPE), que ejercía como uno más de los colaboradores. Por cierto, abundando en el asunto de los horarios poco competitivos, Sudáfrica Veinte-Diez se emitió los viernes a la una de la madrugada tras El Larguero a partir de marzo de 2010 (desde el seis de junio la cita se convirtió en diaria pero no tuvo reflejo en la programación de la SER).
La charla se estructuraba en torno a varias secciones: Luz y Sombra (lo mejor y lo peor), Contragolpe (entrevistas), Palabra de gol (personajes ajenos al fútbol) o Sudáfrica al desnudo (reportajes sobre la cultura, historia y tradiciones del país anfitrión).
De regreso a Carrusel Mundial, tampoco ha sido Londres 2012 la primera ocasión en la que se ha emitido diariamente, también sucedió así durante la celebración de la última Copa América en el verano de 2011, etapa en la que Víctor Hugo Morales compartió la conducción con el titular habitual, Mauro Smith. Y hablando de Morales, hay que citar su estancia en España en abril de 2011 para retransmitir de forma excepcional la final de Copa (de fútbol) entre R. Madrid y F.C. Barcelona y que compatibilizó con la conducción de su programa matinal en Argentina.
Y un último caso: El colombiano Alfredo Castro también realizó un camino de ida y vuelta cuando abandonó durante una temporada Radio Caracol para suceder al gran Javier Ares (la SER fue su puente entre Antena 3 Radio y Onda Cero) como voz del ciclismo (apoyado por un Manolo Lama sobre-expuesto). Cuando la experiencia terminó, Iñigo Markínez se convirtió en el referente de la cadena en esta disciplina (una elección tremendamente acertada).
La música es el puente:
Cuarenta Principales (y Bésame)
Antes de meternos en harina con el Hora 25 Global toca hacer escala en las cadenas musicales de PRISA Radio, en las que coinciden un intento de homogeneización (en la denominación, público al que van destinadas, estética,…) con el respeto a las marcas ya asentadas (aunque con mutaciones como la de la argentina FM Hit a 40). Entre emisoras puntuales y cadenas musicales, PRISA Radio suma cinco en España y más de treinta en toda Latinoamérica de las cuales nueve reciben la denominación Cuarenta Principales (y, por tanto, trabajan el formato Contemporary Hit con especificidades latinas).
Cuarenta supone una tercera parte del total de las musicales del grupo (en cuanto a entidades, no postes de emisión) y su presencia se extiende a nueve países de habla hispana, es decir, todos aquellos con presencia de PRISA Radio (en EE.UU. sólo posee talk radio). Es más, en Guatemala y Ecuador su única presencia es a través de la radio-fórmula.
Todo apunta, pues, a una clara voluntad de internacionalizar la marca en el mercado hispanoamericano (también de diversificación con una comunidad virtual, agencia de viajes, tarjeta de crédito, teléfonos móviles, revista impresa, restaurante temático, un musical, canales de televisión,…) Pero Cuarenta no es la única cadena con presencia en más de un país: Bésame (su denominación lo dice todo y sus diversos lemas lo rematan: «Radio apasionada» o «Romántica y Moderna») tiene presencia en México, Costa Rica, Panamá y Colombia. No así en España, donde Cadena Dial ocupa, en parte, su lugar (no hay más que recordar aquel lema de «Romántica y Latina»).
Cuarenta Principales suena en los estados citados y, además, en Guatemala, Ecuador, Chile, Argentina, Andorra y España, donde tuvo su origen en los años sesenta y su eclosión en los ochenta (aunque su génesis proviene del Top Forty estadounidense). No hay emisión en cadena pero sí un evento que las reúne durante una noche (a la que hay que sumar la campaña de votación y la promoción previa) a todas las cadenas Cuarenta.
Bueno, durante una noche visto y oído desde España, que es donde se han celebrado cada mes de diciembre las siete ediciones de los Premios Cuarenta Principales… más concretamente desde el Palacio de Deportes de Madrid. Desde la segunda edición se involucró al resto incluyendo las categorías de premios para cada país (la mayoría de galardones se deciden por votación popular).
Su origen está en los macro-conciertos pre-navideños denominados Principales Solidarios (que en México se siguen haciendo). Cuando la fórmula amenazaba con agotarse debido al indigesto repunte de telemaratones y similares, se decidió que el gran evento anual de la radio-fórmula musical líder de audiencia en España sería -no esperes un alarde de originalidad- una entrega de premios al estilo MTV Awards pero centrado en el mundo castellano-hablante. Su primera edición coincidió con el año 2006 y, por tanto, con el cuadragésimo aniversario de los Cuarenta.
Y unos pocos apuntes más: Por ejemplo, que abría que enlazar cadenas, eventos e intereses del grupo en la industria musical o reseñar aquel Del 40 al 1 Latino conducido por Tony Aguilar (y en el que colaboraba el añorado Joaquín Luqui) y emitido domingos por la noche como un precursor de todo lo posterior. Ah, y aquella sección en La Ventana de Verano de 2010 en la que Marta González Novo reunía semanalmente a DJ’s de radios del grupo –Andrea Camarata desde Argentina, Juan Camilo desde Colombia o el mexicano Hugo Martínez– para charlar. Así relató Camarata la experiencia a Mª Celeste Lavalle:
«Participé en un programa llamado La Ventana que se emitía en España y allí participamos chicos de todos los países donde estaba 40 Principales contando situaciones y vivencias que sucedían en cada país como cronistas en vivo».
Vocación de trascendencia:
Hora 25 Global y La Ventana al Mundo
Antes de uno y otro espacio, las cadenas y emisoras participadas por el grupo PRISA (no así la SER) ya emitieron conjuntamente Diario de la Guerra desde los estudios de Miami, una crónica de lo que sucedía en aquellos días en Irak y que permitió una cobertura de calidad sin que se disparasen los gastos. O, en palabras de sus responsables: «Es el primer noticiario en cadena para América Latina a cargo de una sociedad de emisoras unidas y coordinadas periodísticamente para generar entre ellas un producto común«.
En esa misma época y como antecedente directo de Hora 25 Global, podemos registrar la emisión de La Ventana al Mundo, que sustituyó durante una hora la programación habitual vespertina de la SER -en la mañana del continente americano- y en la que sólo la presencia de Iñaki Gabilondo, en un horario desacostumbrado, evitó que aquello se ganara el apelativo de rimbombante. Ayudó para darle aquella apariencia de solemnidad y grandilocuencia el tono, las sintonías y la presencia de personalidades reconocidas (y reconocibles) y del mundo iberoamericano. Muchas de ellas también participaron, años después, en Hora 25 Global. Me refiero a políticos pero también a intelectuales.
En esta edición (única) de La Ventana al Mundo participaron, como representantes del primer grupo, los presidentes Vicente Fox (México) y Ricardo Lagos (Chile) o el ex presidente español Felipe González, una presencia habitual en los estudios de Cadena SER y, como representantes del segundo, literatos y periodistas como el argentino Tomás Eloy Martínez o el mexicano Carlos Fuentes. Fue una presentación en sociedad del Grupo Latino de Radio que luego pasó a formar parte de Unión Radio y, por último, a denominarse PRISA Radio.
El ocho de abril de 2003 a las cinco de la tarde -curiosamente, no a las cuatro, hora habitual de comienzo de La Ventana de Nierga- Gabilondo saludó con boato a una audiencia estimada de quince millones de oyentes repartidos entre Radio Caracol de Colombia, Panamá y EE.UU. (su emisora de Miami), W-Radio de México y Chile y la propia Cadena SER. Según el propio grupo, por entonces reunían más de setecientos postes que se vistieron de domingo para emitir «un programa de vocación internacional que supone una emisión conjunta para España y cinco países de América (…) que supone un auténtico acontecimiento en la radio española e iberoamericana (…) por primera vez en la historia de la radio privada«.
Una hora en la que Iñaki Gabilondo charló de temas de actualidad con las personalidades citadas y en el que estuvo acompañado por las y los comunicadores radiofónicos estelares de las diferentes emisoras (Astudillo, Arizmendi, Loret de Mola, Molinar y Restrepo). Sus responsables aseguraron que el espacio tendría «continuidad en ediciones posteriores, aunque sin un calendario concreto, adaptándose a distintos acontecimientos políticos, culturales o deportivos«.
Cinco años después nos topamos con Hora 25 Global, un proyecto que tuvo una vida breve en términos radiofónicos: Se emitió entre el invierno de 2008 y el verano de 2011. ¿Estuvo su final relacionado con el hecho de que la crisis de los controladores aéreos españoles de julio de 2010 explotara con Ángels Barceló en plena emisión de Hora 25 Global?
Y es que, en esta ocasión, la voz cantante la llevó, con la solvencia acostumbrada, la periodista barcelonesa (Gabilondo ya había sido destinado, como voluntario forzoso, al informativo de Cuatro). El programa se insertaba de forma natural en la programación de la Cadena SER y en el mediodía del resto de cadenas no musicales de PRISA Radio repartidas por Latinoamérica.
Cada edición estaba dedicada a un tema de forma monográfica y se cuidaba que los invitados/as procedieran de diversos países para fomentar la diversidad de miradas y los breves reportajes procedieran de las distintas cadenas del grupo para hacer partícipes a todas ellas. Otro ejemplo de esta vocación fue el hecho de que Barceló nunca fue sustituida en sus ausencias por una o un periodista de la Cadena SER sino que rotó por otras voces de PRISA Radio.
Entre los temas tratados, además de los previsibles que afectan a la comunidad hispanoamericana, se tocaron otros palos: medio ambiente, sociedad, deporte, política internacional o temas aparentemente más frívolos (sólo aparentemente). Quizás la edición más emotiva fuera la emitida desde un Haití post-apocalíptico. Entre lo negativo, la pausa a mitad de programa de casi diez minutos que rompía el programa.
En cualquier caso, Hora 25 Global es una mirada de tú a tú. Por cierto, el término “global” se convirtió en bandera del grupo mediático pues también pasó a formar parte de la cabecera de El País tras la renovación de sus secciones y maquetación (de «Diario independiente de la mañana a «El periódico global en español».
Àngels Barceló resumió su participación en el programa como «una experiencia brutal por el nivel de sus colaboradores«. Y, añadiría yo, por su repercusión potencial, calculada en quinientos postes, un site propio y una audiencia estimada de más de veinte millones de personas. A los ya citados Lagos (ya en calidad de ex-presidente), Eloy Martínez, Fuentes o González se sumaron otras voces que pasaron a ser invitados/colaboradores/participantes habituales como las del mexicano Jorge Volpi (con contrato con Alfaguara, editorial del Grupo Prisa) o el chileno Jorge Edwards. Frente a estos nombres y cifras, la opinión crítica del blog RadioChips:
«Creo que nadie se ha apenado demasiado de que haya terminado el Hora 25 Global (…) No digo que no estuviera bien hecho, que se clavaban unos reportajes y unas entrevistas con presidentes que bien otros los quisieran, creo que lo que piensen en Colombia de algunos temas no nos importa demasiado igual que para un colombiano, el que le salga Barceló haciendo un programa desde España y del que traten temas hechos desde España principalmente, le debe sonar casi a invasivo«.
«Siempre me pareció que hacer este programa era un poco más capricho de los jefes de tener un programa en plan despliegue (…) que por convencimiento real»
«No, no creo en una radio tan transoceánica. Ni siquiera creo que entre americanos les interese tampoco excesivamente lo que ocurra a distancias enormes de sus países cada semana. No sé si realmente a un argentino le interesa lo que ocurra en México cada semana. No sé, igual sí.»
«Mucha calidad pero le faltaba gancho al asunto. Se lo han cargado sin ruido. Quizá para que no se notase que no tuvo la repercusión esperada«.
Por ahí apuntaba su génesis, pues nació con la intención de «convertirse en el gran programa referente de opinión de habla hispana«, lo que se se tradujo en el fomento de su eco e influencia ofreciendo, además de la versión en podcast, transcripciones del programa en castellano e inglés.
América Estéreo, un mercado por explorar
En el invierno de 2010 se ponía en marcha América Estéreo Madrid, una iniciativa del Grupo Prisa a partir de una demanda -la de la comunidad latinoamericana- y la posibilidad de ofrecer contenidos a través de la por entonces creciente presencia del grupo en la radio hispanoamericana.
Dos sombras se cernían sobre el proyecto: Obviar la heterogeneidad de la comunidad latinoamericana (a pesar de compartir lengua) y la presencia en el dial madrileño de un puñado de radios piratas (comerciales sin concesión de licencia que, en ocasiones, intentan ocultar su ánimo de lucro a través del asociacionismo o el espíritu de servicio público). Una jungla con apariciones y desapariciones sin control, cambios de denominación o punto del dial, denuncias,… el panorama se completaba con dos presencias legales: Radio Tentación (sólo parcialmente dedicada a la audiencia latina) y Top Radio (que, cuando era la fórmula musical de Radio España llegó a poner en cuestión el liderazgo de Los 40 Principales).
Desde el 103.9 de la F.M. (y los estudios de Gran Vía, 32) América Estéreo -denominación que comparte con emisoras de Ecuador o Paraguay pero que me trae a la memoria a la banda Soda Estéreo, muy populares en toda Sudamérica pese a que su éxito no llegó a España- comenzó emitiendo contenidos procedentes de W Radio de Colombia, participada por PRISA. es el caso del programa presentado por Julio Sánchez Cristo (laborables a media mañana), hasta ese momento audible en la histórica y decadente Inter de Onda Media (actualmente forma parte del grupo Intereconomía). Como referencia, el espacio de Sánchez Cristo contaba por entonces en su país de origen con una audiencia medio millón de personas (dato que, con todas las salvedades posibles, puede ser valorado teniendo en cuenta que la población de Colombia es similar a la de España).
El otro gran contenido de América Estéreo hace honor a su lema: «Donde vive la música latina«. Ahí entra en escena su director de contenidos Fernando Labrador, conocido por Tropidance, un programa que comenzó a emitirse allá por 1992 en Cadena Dial (y que en los últimos tiempos lo hacía en el fin de semana en el archipiélago canario y en América Stereo para Madrid). Ah, como indica su título, Tropidance está dedicado a la música tropical y latina: Salsa, merengue, bachata, reggaeton, baladas, boleros,…
En cuanto a Labrador, es músico, compositor, presentó dos giras del Super Uno (que luego pasó a ser conocido como Zona 40), pasó por RadiOlé (que fue RadiOlé Tropical en Canarias), fue una de las caras de 40 Latino en 40TV y actualmente concentra sus proyectos en Distrito Musical donde intenta «ponerle una clave de Sol a todas las acciones que llevamos a cabo«.
América Estéreo es un intento de profesionalizar -desde la legalidad y el know how de PRISA- la radio destinada a la comunidad latinoamericana (como lo fue en Catalunya la recientemente desaparecida en Latin COM de COM Ràdio). Un intento que no se ha extendido a otros puntos de la península y que, frente a la citada heterogeneidad del público latino, apuesta por un contenido compartido (y más económico): La música.
Imagen/ Cadena SER, See Wah